” Del 24 de febrero al 3 de marzo se realizó una bendecida Misión Mariana en el pueblo de Don Benito, de la diócesis de Plasencia, en Extremadura.
En este pueblo de cerca de 40.000 habitantes con cuatro parroquias y muy bien comunicado, está la iglesia de mayor número de fieles de la diócesis, Santa María, cuyo párroco D. Juan Manuel De Miguel Sánchez nos solicitó esta misión para atraer las almas al Inmaculado Corazón de la Santísima Virgen.
Ya desde la llegada de la Imagen de Nuestra Señora, con la iglesia repleta de fieles, muchos de ellos niños, se percibía mucha devoción que fue creciendo a lo largo de la semana, al ir visitando las casi cien casas que han abierto sus puertas para poder rezar unos momentos por todas las intenciones de las familias.
La mayoría de los hogares contaban con muchísimos vecinos y personas conocidas que no querían perderse este celestial momento en que la Santísima Virgen derrama sus gracias en los corazones de todos.
Se pudo visitar el colegio de las religiosas Hijas de María Madre de la Iglesia, donde está enterrada la Beata Madre Matilde Téllez, muy querida y venerada en Don Benito, donde casi 400 chicos pudieron rezar y besar la Imagen de Nuestra Señora, en un ambiente muy bendecido, con la asistencia de muchos padres de los alumnos.
Tanto el centro de acogida de Cáritas, Virgen de las Cruces, como la residencia Alonso Mendoza de ancianos, y el hospital de San Antonio, también de las religiosas de la Beata Madre Matilde, abrieron sus puertas para que todos los enfermos y personal sanitario pudiera tener un momento de oración junto a nuestra Madre del Cielo.
El sábado, con la procesión de antorchas, y el domingo con la Misa de despedida de la Imagen de Nuestra Señora de Fátima, fueron dos días de muchas bendiciones para los cientos de fieles que no cabían en la iglesia parroquial, y cuyo párroco D. Juan Manuel no podía disimular su alegría y agradecimiento a la Santísima Virgen por haber convocado a tantos hijos de esta ciudad extremeña.
Fue la gran aglomeración de fieles, tanto en las misas de diario, como en la procesión de las antorchas y en la misa de despedida lo que nos sorprendió a todos.”