Terciarios y cooperadores de los Heraldos del Evangelio, naturales de Cabo Verde pero que viven en Róterdam, Holanda, visitaron la Basílica de la Virgen del Pilar, en Zaragoza, haciendo su consagración a la Reina del cielo y de la tierra para servir más perfectamente a Jesús. Como agradecimiento a la Virgen, realizaron una hermosa ofrenda floral al final de la Santa Misa, que fue celebrada por D. José Vicente, canónico de la Basílica del Pilar.
El mismo día, visitaron las casas de los Heraldos del Evangelio en Toledo y en Madrid, donde llevados por este espíritu de oración que los trajo a España, no dudaron en participar en una segunda Eucaristía antes de su viaje de vuelta a Holanda.
Los Heraldos de España hacen votos de que ellos puedan ser verdaderos misioneros en su país, y les prometen que la oración de los sacerdotes Heraldos no faltará.